El Asilo San Rafael, para niñas raquíticas y escrofulosas pobres, fue fundado el 31 de marzo de 1889 por el Padre Benito Menni.
La aportación económica de Dª. Dorotea Chopitea, muy conocida en aquellos tiempos por su generosidad hacia las personas sin recursos, fue clave en la creación de este Centro y, hasta la década de los setenta, el asilo se mantuvo gracias a la ayuda que recibió la Congregación de las Hermanas Hospitalarias por parte de muchas familias de Barcelona y de la comarca. La primera ubicación fue en la calle Cabestany número 1 del barrio de Les Corts de Barcelona.